Serie estructurada desde la Astrología, con un enfoque vitalista.

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Consta de doce polípticos en técnicas de pintura. Cada uno se trabajó en alusión a los signos del Zodiaco romano, partiendo de imágenes ya existentes.

Se realizó en orden cronológico, conforme al movimiento planetario que marca las fechas de los doce signos, y en el cual se accionó un proceso y archivo artístico de música, fotografías, literatura e incluso cambios en la apariencia física del autor, de acuerdo a las características de dichos signos; todo esto para nutrir a profundidad el resultado pictórico. Por tanto, la fecha que comprende cada signo(un promedio de veintiocho días) fue respetada para trabajar uno a la vez, durante un año; representando espacios, personas, acciones y paletas cromáticas, como un intento de evocar un conocimiento antiguo sin aludir a símbolos o esquemas concretos de esa tradición de pensamiento.